Todo lo que necesitas saber sobre las tasas permitidas de alcoholemia y cómo estar por debajo de ellas

¡Mantén el control de tu salud y tu seguridad vial!

Cuando hablamos de beber y conducir, hay ciertas reglas que no podemos ignorar. Las tasas permitidas de alcoholemia son poco más que leyes que parecen complicadas, pero en realidad, son como los límites de velocidad en la carretera: allí están para protegernos. En este artículo, desglosaremos qué significan esas tasas, cómo puedes mantenerte por debajo de ellas y qué hacer si te atrapan. ¡Así que abróchate el cinturón porque vamos a entrar en materia!

¿Qué es la alcoholemia?

La alcoholemia se refiere a la concentración de alcohol en la sangre. Es como medir cuán ‘alegre’ está nuestro cuerpo. Este nivel se expresa generalmente en gramos de alcohol por cada litro de sangre (g/L). ¿Quién diría que una cervecita podría tener tanto impacto, verdad? Así que, ¡presta atención!

¿Cuáles son las tasas permitidas de alcoholemia?

En España, las tasas permitidas de alcoholemia varían según el tipo de conductor. Por ejemplo:

Conductores generales

La tasa máxima permitida es de 0.5 g/L. Esto significa que si has disfrutado de unas copas, es crucial que sepas dónde estás parado. Si superas esta cantidad, podrías recibir sanciones.

Conductores noveles

Para los conductores con menos de dos años de licencia, la tasa permitida es de 0.3 g/L. ¡Este grupo tiene que tener cuidado! No solo deben ajustar su alcohol, sino que también deben estar muy atentos a la cantidad de cervezas que deciden “probar”.

Conductores profesionales

Los que manejan vehículos de transporte público o de carga tienen que estar en 0.0 g/L. En este caso, el mantra es ‘sin alcohol en el sistema’. Es mejor prevenir que curar, ¿no crees?

¿Cómo se mide la alcoholemia?

La alcoholemia se mide generalmente a través de un test de aliento, pero también se puede evaluar mediante análisis de sangre. Ambos métodos tienen sus pros y contras, pero el aliento es mucho más común en las detenciones rutinarias. Así que, si piensas que puedes evadir un control de alcoholemia, piénsalo de nuevo.

Test de aliento

Este sistema mide la concentración de alcohol en el aire espirado, ofreciendo resultados casi instantáneos. ¿Pero qué pasa si te niegas a hacer el test? Puede que no sea una buena idea, ya que puede resultar en sanciones más severas.

Test de sangre

Los análisis de sangre son más precisos y se realizan en un entorno clínico. Si has estado bebiendo y crees que has fallado el test de aliento, podrías pasar a un test de sangre que podría cambiar las cosas, pero eso puede ir en tu contra.

Consejos para estar por debajo de las tasas permitidas

¿Te imaginas salir a tomar algo con amigos y volver a casa a salvo? A continuación, algunos consejos que te ayudarán a mantener tu alcohol en niveles seguros:

Conoce tus límites

Antes de empezar la noche, infórmate sobre cuántas copas puedes tomar. La regla general es que una bebida equivale a aproximadamente 0.2-0.3 g/L, pero esto puede variar. Así que, ¡a calcular se ha dicho!

Come antes de beber

Comer es esencial. Si comes bien antes de beber, tu cuerpo absorberá el alcohol de manera más lenta. ¡No hay nada como un buen bocadillo para protegerte!

Alterna bebidas

Alternar una bebida alcohólica con agua o refrescos puede hacer maravillas. Imagina que tu cuerpo es una esponja; si la empapas con agua, no absorberá tanto alcohol. ¡Genial, verdad?

¿Qué hacer si te detienen?

Si te detienen y has estado bebiendo, lo más importante es permanecer calmado. Tan fácil como lo suena, ¿verdad? Aquí te dejo unos pasos que pueden ayudar:

No te pongas a la defensiva

Recuerda que los agentes de policía están ahí para asegurarse de que todos estemos a salvo. Responde a sus preguntas cortésmente y, si te piden un control, ¡hazlo!

Pide asesoría legal

Si la cosa se pone complicada y crees que necesitas ayuda, no dudes en solicitar un abogado. Es mejor tener respaldo legal que enfrentar la situación solo.

¿Cuáles son las consecuencias de superar las tasas permitidas?

Si te sorprenden, prepárate para las consecuencias. Las sanciones no son nada agradables:

Multas económicas

Las multas pueden variar dependiendo de la gravedad de la infracción, desde unos cientos de euros hasta cantidades mucho más elevadas. ¡Así que cuida tu bolsillo!

Puntos en tu licencia

Dependiendo de cuán por encima estés de la tasa, puedes perder hasta 6 puntos de tu licencia. ¡Ay, eso duele! Cada punto menos es un paso más cerca de perder tu licencia.

Posible arresto

Si eres un reincidente o si superas la tasa permitida en gran medida, podrías enfrentarte a un arresto. No es que quieras pasar la noche en el calabozo, ¿verdad?

Alternativas al volante

Si ya has decidido beber y no quieres salir en una noche de arresto, considera estas alternativas:

Usa el transporte público

En muchas ciudades, el transporte público es asequible y va donde lo necesitas. Además, no tienes que preocuparte por el aparcamiento. ¡Perfectas las dos cosas!

Designado conductor

Siempre puedes nombrar a un amigo como el conductor designado. Así, todos pueden disfrutar de la noche y regresar a casa sanos y salvos.

Servicios de taxi o ridesharing

Hoy en día, hay muchas aplicaciones que facilitan conseguir un taxi o un conductor en minutos. ¡No hay excusas para arriesgarse!

La responsabilidad al volante comienza con una elección consciente. Cada vez que decides beber, también decides si estás dispuesto a arriesgar tu vida y la de los demás. Así que asume esa responsabilidad. Mantente informado, actúa de manera sensata y, sobre todo, cuida de ti mismo y de los demás en la carretera.

¿Qué puedo hacer si creo que he superado la tasa permitida?

Lo mejor es evitar conducir en cualquier caso. Usa el transporte público o llama a un taxi. Es mejor pecar de precavido que arrepentido.

¿Cuánto tiempo tarda el cuerpo en eliminar el alcohol?

Por lo general, el cuerpo elimina aproximadamente 0.1 g/L de alcohol por hora. Así que, si has tomado más de lo que deberías, lo mejor es esperar.

¿Puedo consumir medicamentos y alcohol al mismo tiempo?

Siempre es recomendable consultar a un médico antes de mezclar medicamentos con alcohol. Algunos pueden potenciar los efectos del alcohol de maneras peligrosas.

¿Qué pasa si me ofrezco a ser el conductor designado, pero acabo bebiendo?

Si cambias de opinión, es crucial encontrar una alternativa para volver a casa. No arriesgues tu vida ni la de los demás. ¡Siempre hay opciones!